Desde hace tres semanas, Thomas vive en una habitación sin ventanas, de un blanco resplandeciente y siempre iluminada. Sin reloj y sin contacto con nadie, más allá de las tres bandejas de comida que alguien le lleva a diario (aunque a horas distintas, como para desorientarle).
Al vigésimo sexto día, la puerta se abre y un hombre le conduce a una sala llena de viejos amigos.
—Muy bien, damas y caballeros. Estáis a punto de recuperar todos vuestros recuerdos. Hasta el último de ellos.
Al vigésimo sexto día, la puerta se abre y un hombre le conduce a una sala llena de viejos amigos.
—Muy bien, damas y caballeros. Estáis a punto de recuperar todos vuestros recuerdos. Hasta el último de ellos.
Bueno, no me he matado mucho con el resumen, pero es el que más me ha gustado de los tres libros.
En esta ocasión, toda la historia da un giro y pasan un par de cosas bastante impactantes. En dos palabras (que llevo repitiendo mil años) ME ENCANTA.
EL otro día descubrí también que hay una secuela titulada El destello. LA NECESITO. (Si, me enteré años después, yo voy con un poquito de retraso...)
¡Y ya está!
Me propuse un reto el lunes pasado: leerme toda la trilogía para que cuando saliera la última película, saberlo todo sobre El corredor del laberinto. ¡Conseguido!
Me propuse un reto el lunes pasado: leerme toda la trilogía para que cuando saliera la última película, saberlo todo sobre El corredor del laberinto. ¡Conseguido!
Bueno, ¡hasta la próxima, Saqueadores!
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